Strangers


Extraños. Los tenemos más cerca de lo que pensamos. Viven en nuestro alrededor cada día. Muchos de ellos los consideramos algo. Algo que no son. Vivimos engañados y, ahora sabréis porque:

Desde siempre, el ser humano ha sentido miedo a la soledad, a verse obligado a sobrevivir en un mundo hostil y duro que puede acabar con él en cualquier momento. Este miedo, lo ha superado creando vínculos. Círculos y uniones con otros seres que también comparten tal temor y, muchas veces, por no decir todas, ha introducido a estas personas en su circulo más personal de forma inconsciente. Nadie puede saber que hay detrás de un rostro, sino es éste el que ya lo ha vivido.

Estos mismos de los que os hablo, son los que luego aparecen en las noticias, algunos como víctimas otros como culpables, y de repente la gente como tú, ocurrente y simple se pregunta: – ¿Cómo es posible? ¿quién lo iba a decir que fuera en realidad un…

¿Un qué? Un desconocido.

Y me preguntaréis ¿cómo se puede evitar?, pues bien, yo os respondo: Tu conciencia, es ella la que te tiene que alertar frente a lo desconocido. Si os soy sincero, la culpa no es de esto, sino de vosotros, de nosotros en general, que al fin y al cabo, somos los únicos culpables de querer vivir en una utopía donde el sol brille cada día en vez de arreglar el mundo en el que ya vivimos.

Más cercanos a vosotros, incluso en los núcleos más cerrados de vuestra confianza es donde se esconden los verdaderos desconocidos, los cuales ignoramos durante una eternidad y luego lloramos su muerte sin motivo.